El Origen de las Enfermedades de la Mujer Madura – II

II:- Enfermedades del útero, de la mama y del ovario

Los ciclos menstruales son períodos de inestabilidad hormonal.

Durante la primera mitad del ciclo el organismo prepara los órganos encargados de sostener un embarazo y posterior lactancia; al no ocurrir el embarazo estos tejidos se desechan parcialmente para iniciar un nuevo intento, y así sucesivamente.

En el útero se multiplican las células endometriales formando una “cama” para recibir al embrión; al no producirse el embarazo el tejido pierde sustento y se elimina como un sangrado genital (menstruación). La exposición permanente a estas fases de crecimiento y posterior “frustración orgánica” conlleva la aparición de enfermedades del útero (Miomas, Adenomiosis, etc) que pueden alterar significativamente la calidad de vida. Sangrado excesivo, dolor abdominal, cambios en el ánimo, cefaleas y baja en el deseo sexual, son algunos de los síntomas asociados.

El examen ginecológico periódico apoyado por ecotomografía doppler color permite diagnosticar estas alteraciones y por tanto encontrar las soluciones adecuadas para reestablecer una buena calidad de vida.

Las glándulas mamarias también reaccionan a estos cambios hormonales, multiplicando las células que posteriormente producirán leche. Las células de la glándula mamaria tienen dos etapas en su preparación:

  • a.- proliferación (multiplicación celular) y
  • b.- maduración (que solo se alcanza en el 4to mes de embarazo). Al quedar detenida la multiplicación celular antes de su maduración, muchas células quedan en una etapa de división celular incompleta, lo que las hace propensas a desarrollar lesiones cancerosas.

El examen clínico, la mamografía y ecotomografía periódicos permiten un diagnóstico temprano y un tratamiento curativo en la mayoría de los casos.

Está demostrado que las mujeres que cursan tempranamente su primer embarazo, que tienen mayor número de hijos y períodos de lactancia prolongados, están menor tiempo expuestas a períodos de inestabilidad hormonal y tienen menor tendencia a las enfermedades descritas anteriormente.

Aumento de las expectativas de Vida

El ovario cuya programación genética (ADN) le permite un funcionamiento óptimo hasta los 35 años, trabaja hasta agotar sus reservas aproximadamente a los 50 años, quedando vulnerable a la aparición de lesiones que pueden desembocar en un cáncer ovárico.

El examen clínico y la ecotomografía doppler periódica ayudan a pesquisar precozmente estas lesiones y ofrecer un tratamiento adecuado.

La falla de la función hormonal del ovario (no prevista en la información genética) lleva a la desestabilización de numerosos procesos en el cuerpo humano: alteraciones anímicas, bochornos, descenso de la líbido, cambio en los niveles del colesterol, tendencia a la hipertensión y alteraciones en el metabolismo óseo que pueden llevar a la osteoporosis con el consiguiente riesgo de fracturas.

En este período, la post-menopausia, fuera del alcance del manejo adecuado por la información contenida en el ADN, se debe intervenir con medicamentos, eventuales cirugías y cambios de hábitos, que permitan corregir las alteraciones que deterioran la calidad de vida.